Título: Skaar. Rey de la Tierra Salvaje
Autores: Rob Williams, Brian Ching, Rick Ketcham
Editorial: Panini
Páginas: 120 páginas, color (rústica)
PVP: 9.95€
Rescatando del montón de las lecturas atrasadas algunos cómics pendientes como refugio a la fiebre y la tos que me han encerrado en casa unos días, disfruto de algunas historias exóticas y ligeras de esas que se digieren en apenas un ratito tras meses de paciente espera.
SKAAR REY DE LA TIERRA SALVAJE es un tomito de Panini con las aventuras del bárbaro hijo alienígena de Hulk en su destierro de la Tierra Salvaje y cómo en apenas 6 números de pura acción sin freno se enfrenta a todas las amenazas posibles en pos de salvar su pellejo y el de los habitantes de tan inhóspita jungla. La narración es ágil y el tono tan adecuado que en tan poco espacio abusa de la cantidad de situaciones y personajes que introduce pero sin rechinar, convirtiéndolo en uno de sus atractivos, aunque sin poder extraer el máximo partido tampoco de ello. Por allí acompañan a Skaar en mayor o menor medida algunas creaciones de la Marvel a las que no veía en su mayoría desde hace mucho, como el rojo Dinosaurio Diabólico y su jinete el simiesco Chico Luna, auténtico contrapunto cómico de estas viñetas, y a los que recordaba en un lejano cómic de mi infancia como habitantes de un pasado remoto prehistórico invadido por unos extraterrestres muy del gusto de Jack Kirby en lo gráfico, más que en la actual selva escondida de la Antártida.
También Ka-zar y su compañera Shanna la Diablesa, a los que sólo muy recientemente he visto como pareja y equipo, ya que en los tebeos de fórum siempre vi solo al rey de la jungla en los increíbles dibujos de alguno de los hermanos Buscema. Bueno, solo del todo no, que siempre le acompañaba el imponente dientes de sable Zabú, como ahora.
E incluso aparece el pistolero Kid Colt, fuera de su tiempo y lugar, como ya es la única forma de que la editorial recupere a los personajes de sus viejos cómics de pistoleros, ya en desuso.
Recuerdo que no hace tanto Ed Brubaker introdujo con originalidad y acierto de pasada a Kid Dos Pistolas en su miniserie EL PROYECTO MARVELS.
Ya digo, demasiados elementos en este SKAAR, REY DE LA TIERRA SALVAJE, donde además abundan los habituales dinosaurios, robots y máquinas arcanas del apocalipsis, en una coctelera amena y hábil pero saturada.
Por otra parte, el primer tomo de KULL de Dark Horse, sin ser un cómic sobresaliente es una agradable sorpresa, que en los seis números que contiene traza con precisión la situación del reciente monarca usurpador y su peculiar corte en el primitivo mundo que habita, marcando las profundas diferencias (e inevitables semejanzas) con el otro célebre bárbaro nacido de la imaginación de Robert E. Howard. Desde luego, KULL no es el hombre vital y libre de cimmeria, sino un salvaje más reflexivo, oscuro e intrigante. Sus conspiraciones palaciegas no son tan distintas de las que puedan encontrarse en las cortes que visita Conan en sus aventuras pero al ser descritas con mayor detalle, sin ser complejas, parecen un punto más cercanas a las tan traídas series televisivas y novelas influenciadas por el popular JUEGO DE TRONOS de George R. R. Martin, aunque incomparables por muchos aspectos.
La presentación y tratamiento de la influyente iglesia del dios serpiente da mucho juego a todo ello, sin renunciar al aspecto más sangriento y de acción que el género requiere, aunque exige al lector experimentado que ignore en buena medida lo que el bárbaro cimmerio ha "robado" de las historias originales del atlante rey de Valusia.
J.A.Santiago
J.A.Santiago
No hay comentarios:
Publicar un comentario